sábado, abril 25, 2020

Confinación y futuro

Esto de estar encerrado en cuarentena, al principio me irritó un poco, pero después le hallé el gusto por razones mas bien racionales y posteriormente emocionales.

Esto se debe a que me imaginé a Nelson Mandela quien estuvo confinado 27 años en una cárcel en una celda de 3 x 3 mts y salió desde allí sin rencor y con mas espíritu de lucha pero no violenta, y lo describe en su biografía con una claridad maravillosa: "Tienen prisionero a mi cuerpo, pero no mi mente, mi alma ni mi espíritu, y yo soy el capitán de mi vida".

Otro ejemplo maravilloso fue el testimonio de Victor Frankl durante su estadía en el campo de concentración de Auschwit, quien descubrió que había que tener un sentido en la vida que era lo que te daba fuerzas para sobrevivir en ese infierno diariamente, y lo relata tan bien descrito en su libro posterior a ese evento "El hombre en busca de sentido".

Otro extraordinario ejemplo es del escritor Elie Wiesel, quien en su trilogía "La noche; El alba y El día" describe los horrores de estar privado de libertad, tortura, enfermedades, hambre, pero que al fin siempre surge el alba a través de esa noche oscura que le tocó vivir.

Finalmente aparece en mi mete Ana Frank, la joven niña que le quitaron su adolescencia y futuro, viviendo escondida y hacinada, pero que jamás perdió sus esperanzas a pesar de terminar exterminada en un campo de concentración. Su diario es una muestra de que aún en el encierro no perdemos nuestra capacidad de soñar y mirar un futuro mejor.

Entonces con todos esos ejemplos como pudiera siquiera intentar quejarme del maravilloso encierro que tengo, donde soy de los privilegiados que tiene que comer, dormir en una cama limpia, tener ropa lavada y poder bañarme diariamente, y hasta solicitar por Internet mercaderías y otros enseres que se puedan necesitar.

Por otro lado pienso en aquella descripción que hace Benito Baranda en un diario sobre como viven en los campamentos, y poblaciones marginales donde se debe luchar cada día para comer, y ni que hablar de bañarse diariamente, donde el hacinamiento es caldo de cultivo para las pandemias e infecciones, donde escasea el agua y a veces el sanitario es un zanjón cercano a la casa, y suma y sigue.

Entonces me pregunto si somos iguales ante la muerte con este corona virus, seremos mas iguales ante la vida después de esto.

Reflexionemos durante este encierro de cual es el país que queremos, y que podemos hacer para no volver al cotidiano que de seguro nos atrapará al termino de la cuarentena.

jueves, abril 16, 2020

Que hacer

He estado compartiendo en diversos grupos vía videoconferencia, y en todos me topo con mucho diagnostico y poca conversación de que hacer a futuro frente a la situación que vivimos y que vendrá.
Hoy por la mañana conversando vía zoom con Gabriel Bunster me dijo "estuve mirando tu blog y la última vez que escribiste fue en el 2019 y por qué esto que me cuentas no lo escribes", y me picó el bicho y decidí hacerlo.

La cuestión es que dado los diagnósticos generados a partir del estallido social del 18 O, agregándole la pandemia del Corona virus, y por otro lado la degradación del planeta por nuestra forma que hemos como humanos desarrollado nuestro forma de vivir, estamos frente a la tormenta perfecta, y no se ven salidas muy fáciles, ni buenas, ya sea como personas, como ciudadanos de un país y por último como habitante de este planeta y no de otro, ya que no tengo opción de irme a otro.

Entonces el cuento es :¿Qué puedo hacer como persona, como familia y finalmente como ciudadano?
Vamos por parte como dijo mi amigo Jack. Partamos por el final: como ciudadano. Fuera de acatar las instrucciones de las autoridades, y tomar conciencia de que todo esta cambiando y está liquido como dicen los sociólogos, no es mucho lo que puedo hacer, excepto que con aquellos que converso, ya sea por trabajo o por placer de conversar, mostrarles que la sola reflexión sin acción no sirve de nada, así como que también la acción sin reflexión es temeraria, por lo tanto mezclemos sabiamente ambas cosas antes de partir en alguna dirección. Esto me recuerda Alicia en el Pais de las maravillas, cuando se encuentra con una bifurcación de caminos con tres opciones, y se le aparece el gato de Cheesier y ella le pregunta ¿Cual camino me sirve? él le contesta:¿Para donde vas? y ella responde: No sé, y el gato le dice "Entonces cualquiera te sirve".

Ahora miremos el asunto desde la óptica de la familia, y me refiero a hijos y nietos directamente. Algunos podrán agregar hermanos, padres, amantes o lo que quieran y que consideren familiar.
Cada uno de ellos es un núcleo independiente de mi, con sus propios problemas, deseos, sueños, y su propia familia de la cual preocuparse, etc y lo único que nos une a mi es un tiempo histórico en común, que fue su niñez, adolescencia y punto, por lo tanto emociones del pasado y que si me atrapan en el presente me condicionan. Yo ya hice la pega con ellos y tampoco puedo exigirles que en mi vejez se preocupen de mi, intento no ser una carga adicional para ellos. Por lo tanto, los saco de mis futuras decisiones aunque a ellos y en parte a mi me duela.

Entonces vamos al final ¿Que hacer como persona? (en esto incluyo a mi esposa con quien hemos conversado a fondo este tema). La primera decisión que hemos tomado es que decidimos cambiar el estilo de vida que hemos traído hasta ahora en el último tiempo, y para ello hemos revisado nuestra manera de consumir, ojo con la palabra que usé "consumir" y no "comprar", aclaremos esto: consumir es algo que se termina, por ejemplo una vela se consume, y comprar es algo que se adquiere, sirva para consumirlo o no, y esto último sucede en la mayoría de los casos. Esto quiere decir vivir modestamente, no cayendo en la moda, la tecnología que se obsoletea constantemente, y evitando la publicidad que te lleva a comprar un montón de cosas que finalmente no te sirven mucho. Por lo tanto comprar aquello imprescindible para comer, asearse y vestirse, y punto. Lo mas probable es que solo necesites para las dos primeras ya que cuando abrí los closets me encontré con gran cantidad de ropa que pocas veces he usado. También revisé la bodega y me encontré con un montón de cosas inútiles que hemos guardado por si alguna vez las necesitamos, patrañas.

Finalmente, decidimos usar todos los elementos que adquiramos hasta el final y no caer temas como quedó un poquito no mas , así que bótalo no mas, que nadie no lo querrá o usará.
Como ven, estamos partiendo por algo mas concreto que el sólo diagnóstico.
Los invito a pensar y actuar al respecto.